

VOCES DEL AMADO
Despierta, despierta
mi amada,
despierta de tu sueño de tristeza y abandono.
Despierta,
que mi corazón
espera por tu amor,
despierta,
que clavado desde la cruz
me gozo en tus cantos de adoración y alabanza.
Te entristeces
porque tus manos
están llagadas y tus pies cansados por la dura jornada;
pero no te acercas a mí,
no puedes ver
que tus batallas,
son la victoria puesta en mis manos?
Entregas tu primogenitura
a las voces del usurpador,
si tan solo pudieses
estar atenta a mi mirar….
He escuchado tus palabras,
cuantas veces,
suplicas desesperadas por huir de tu dolor,
no te das cuenta
que tu corazón está en mis manos?
He estado junto a ti,
cada vez que llevas tus plegarias frente al altar;
pero cuantas veces
has permanecido indiferente
ante mis delirios de amor por ti.
Acaso,
buscas mi rostro
tan solo por tu complacencia
y no por mi amor?
Despierta,
despierta amada mía,
abre pronto tus ojos
y corre presurosa al corazón de tu amado,
que en nuestra boda,
en nuestra unión por el amor,
es la vida misma
la que te entrego,
despierta ya,
viviendo en santidad,
y vive
por el gozo
del fuego del amor de mi corazón.








